En una clínica dental, tanto el personal odontológico como sus pacientes están expuestos a una gran variedad de microorganismos a través del instrumental, el equipo, los aerosoles y las superficies que han entrado en contacto con algún fluido corporal. Por otro lado, el personal auxiliar, el odontólogo y los pacientes pueden ser portadores de microorganismos patógenos como la tuberculosis, el VIH o la hepatitis B. Con el fin de impedir que puedan contagiarse, es fundamental adoptar unas medidas eficaces de protección y precaución y saber cómo se eliminan los microorganismos correctamente.
Cómo se eliminan los microorganismos
Existen dos métodos encargados de interrumpir la cadena de transmisión y proteger al paciente:
1. Desinfección
Este procedimiento elimina los microorganismos patógenos.
Se lleva a cabo mediante el uso de productos químicos que actúan a una temperatura ambiente, a una concentración y en un tiempo determinados.
La aplicación del desinfectante depende de su actividad bactericida, fungicida, virucida, tuberculicida, etc.
2. Esterilización
En este proceso se tratará de suprimir de los objetos toda clase de microorganismos en las que habría que incluir a las esporas bacterianas, resistentes a las sustancias químicas y al calor.
Aunque la esterilización se puede conseguir por medio de medios físicos como el calor o las sustancias químicas, el más recomendable parece ser el calor húmedo que se obtiene con la utilización del autoclave, cuya eficacia puede ser comprobada mediante unos controles de calidad externos.
Control del proceso de esterilización
Para garantizar que todas las etapas del proceso se han llevado a cabo de la forma adecuada, contamos con una serie de indicadores que certifican que el material está esterilizado: físicos, químicos y biológicos. En esta ocasión, nos centraremos en los biológicos.
Los indicadores biológicos son aquellos que corroboran la ausencia o la presencia de microorganismos tras haber realizado la esterilización.
El test de esporas forma parte de esos controles biológicos que se realizan al autoclave. Recogen datos relativos al tiempo, el espacio y la desactivación biológica, gracias a los cuales se determinará que el procedimiento de esterilización es seguro.
El control biológico se debería realizar una vez al día en la central de esterilización, cuando los autoclaves son manipuladas, cada vez que ingrese un nuevo miembro en el equipo de la clínica y/o periódicamente con un organismo externo.
Normativa y usos para una correcta esterilización en una clínica
Hay diferentes leyes, normas y decretos que obligan a los profesionales de una clínica a garantizar la calidad de los procesos de esterilización.
En cuanto al uso, en primer lugar, se lleva a cabo los procesos de limpieza y desinfección, ya que es precisa la eliminación tanto de los desechos como de la contaminación del instrumental.
Después de la limpieza del instrumental y otros suministros dentales, éstos deben ser inspeccionados, secados y envasados.
A continuación, tiene lugar la esterilización para destruir todas las formas de microorganismos existentes, incluidas las esporas, componente fundamental en el mantenimiento de un ambiente seguro en el que se ofrecen servicios de salud bucodental.
- Una vez el instrumental está envasado, se procesa en bolsas herméticas que se colocan en la autoclave para eliminar los microorganismos.
- Una vez al mes, se realiza un control biológico en la incubadora dental gracias a la cual se puede comprobar el correcto funcionamiento del autoclave.
- La fecha, la hora, el tipo de ciclo y el resultado de todos los procesos y pruebas biológicas deben aparecer reflejados en un libro de registros.
Tipos de incubadoras dentales
Como método de control, se debe incubar un indicador biológico sin procesar cada vez que prueba el esterilizador. La finalidad es verificar que los indicadores biológicos son viables y que la incubadora funciona correctamente. Algunas de las incubadoras que existen en el mercado son las siguientes:
Incubadora Hygitech
Esta incubadora tiene capacidad para 15 indicadores entre 55°C y 60°C para determinar la eficacia de los procesos de esterilización. La utilización es muy sencilla, una vez se ha puesto en marcha no es necesario ninguna manipulación.
Incubadora B-Test Plus Tecno-Gaz
Está desarrollada para la incubación de indicadores biológicos a 57 °C. Se compone de: un armazón, una carcasa de ABS, un bloque térmico de aluminio con capacidad para tres indicadores biológicos y una tarjeta electrónica para la gestión automática del bloque térmico.
Incubadora BT3 Incotrading
Está dotado de tres alojamientos para indicadores biológicos de vapor de agua. Lleva incorporada un termómetro digital. Y la distribución del calor que realiza es la que constata una correcta incubación de los indicadores biológicos.
Incubadora Attest 3M
Es una incubadora de lectura de indicadores biológicos para vapor 3M Attest 1262. Funciona a una temperatura que contribuye al crecimiento de los microorganismos (56ºC+/-2ºC). Puede llegar a incubar hasta 24 indicadores. Los resultados se pueden llegar a interpretar por un simple cambio de color en el medio de cultivo.
Ahora que sabes cómo se eliminan los microorganismos mediante incubadoras dentales, consigue la incubadora perfecta para tu clínica dental.