Uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta por los y las odontólogas durante el desarrollo de su actividad es la higiene. Las infecciones pueden ser transmitidas de múltiples maneras (vía respiratoria, digestiva, por contacto), pero la vía más frecuente de transmisión de éstas es por contacto a través de las manos.
Numerosos estudios científicos han llegado a la conclusión de que los profesionales sanitarios no tienen la higiene que deberían tener. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud:
El 61% de las y los trabajadores sanitarios no se lavan las manos cuando es necesario.
Por ello, es importante conocer el protocolo de lavado de manos en el ámbito de la clínica dental.
Esta necesidad de mantener una correcta higiene de manos se ha hecho aún más patente con la crisis sanitaria del Covid-19. En este artículo recogemos las recomendaciones pre y post-covid-19.
¿Por qué es importante el lavado de manos?
Las enfermedades más comunes causadas por bacterias y por la falta de higiene son: gripe, dolencias diarreicas, resfriados y catarros o enfermedades transmitidas por vía fecal-oral como la hepatitis. Estas enfermedades causan miles de muertes al año. Recientemente, la aparición del Covid-19 ha puesto de manifiesto la importancia de una correcta higiene de manos como vía de prevención frente a la transmisión de virus.
La higiene de manos tiene el objetivo de eliminar la suciedad, la materia orgánica, la flora transitoria (causante de la mayoría de infecciones nosocomiales) y al máximo la flora residente.
En la actividad diaria dentro de la clínica dental, hay muchos momentos de contacto con el paciente y es vital tener en cuenta estos aspectos. Un buen profesional debe prevenir cualquier riesgo de contagio o contaminación.
Los 5 momentos para la higiene de las manos
La Organización Mundial de la Salud ha definido 5 momentos críticos en los que se debe llevar a cabo el protocolo de lavado de manos.
Los momentos en los que se debe realizar el lavado de manos son: antes de tocar al paciente, antes de realizar una tarea limpia/aséptica, después del riesgo de exposición a líquidos corporales, después de tocar al paciente y después del contacto con el entorno del paciente.
Son recomendaciones para proteger el entorno de atención al paciente. El buen lavado de manos previene y combate el contagio de enfermedades. Según varios estudios previos a la aparición del Covid-19, 1 de cada 2 miembros del personal quirúrgico no se lava las manos cuando es necesario.
Ahora, con los nuevos protocolos y recomendaciones en el ámbito odontológico, además de respetar las indicaciones para un correcto lavado de manos, existen otros protocolos asociados al Covid-19 y que ayudan a prevenir la transmisión de virus por contacto. Puedes consultar por ejemplo el protocolo de actuación frente al Covid-19 en la clínica dental, u otros documentos y protocolos de interés relacionados con el Coronavirus en nuestra web.
Protocolo de lavado de manos
Dentro del ámbito sanitario existen diferentes técnicas de lavado de manos en función de su posterior utilización. Podemos clasificarlos en lavado de manos clínico y lavado de manos quirúrgico.
Para la realización del protocolo de lavado de manos tanto clínico como quirúrgico es recomendable la utilización de un buen jabón antiséptico. El jabón de manos Instrunet Biocida de Inibsa es un jabón antiséptico de amplio espectro con clorexidina al 4%.
Es un jabón ideal para el tratamiento higiénico y la desinfección quirúrgica de manos. No altera la función de la barrera de la piel.
Lavado de manos clínico
Dentro del lavado de manos clínico podemos diferencias entre tres tipos de lavado: el lavado higiénico con agua y jabón, el lavado antiséptico y el lavado con solución alcohólica.
El objetivo del lavado higiénico es eliminar la suciedad, la materia orgánica y la flora transitoria de las manos antes y después del contacto con el paciente.
Para realizar el protocolo de lavado de manos higiénico podemos usar el producto mencionado anteriormente y seguir los siguientes pasos:
- Mojar las manos con agua tibia.
- Aplicar dos pulsaciones del dosificador y enjabonarse manos y muñecas durante 30 segundos. Ten en cuenta frotar palma contra palma, dorsos y entrelazar los dedos.
- Enjuagar con abundante agua.
- Secar las manos con una toallita desechable. Recuerda cerrar el grifo con esta toalla para evitar una posible contaminación.
El lavado antiséptico se realiza con este mismo protocolo pero utilizando un jabón antiséptico.
En cuanto al lavado de manos clínico con soluciones de base alcohólica el proceso es similar. No es necesario utilizar agua, simplemente aplicar el gel hidroalcohólico, frotar las manos y dejar secar.
Lavado de manos quirúrgico
Es importante tener en cuenta que, antes de iniciar el protocolo de lavado de manos quirúrgico, es necesario retirar anillos, relojes y pulseras ya que pueden actuar como reservorio de gérmenes.
El objetivo del lavado de manos quirúrgico es la eliminación de la flora transitoria y en el máximo de flora residente de las manos. Básicamente es tratar de conseguir un alto grado de asepsia antes y después de una cirugía.
El protocolo de lavado de manos quirúrgico tiene los siguientes pasos:
- Humedecer las manos, antebrazos y codos. Aplicar 2 pulsaciones del dosificador en el cuento de la mano.
- Enjabonarse manos, antebrazos y codos, frotar con movimientos circulares, también entre los dedos. Realizar este proceso desde las manos hasta los antebrazos.
- Cepillar las uñas con un cepillo estéril durante 2 minutos y 30 segundos. Enjuagar abundantemente.
- Aplicar de nuevo una dosis de jabón y enjabonar manos, antebrazos y codos. Realizar movimientos circulares desde las manos hasta los codos.
- Enjuagar las manos desde las uñas hasta los codos y secar con una toalla estéril.
Utilización de guantes
Es evidente la importancia del lavado de manos pero también es fundamental el uso de guantes en la clínica. Eso sí, el uso de guantes no sustituye en ningún caso el lavado de manos.
Los guantes son la protección de barrera más importante. Reducen la posibilidad de contaminación entre los y las trabajadoras y los pacientes.
Es importante realizar el lavado de manos antes de la colocación de los guantes e inmediatamente después de su utilización. Además, es importante desechar los guantes contaminados al acabar la tarea sin entrar en contacto con superficies ambientales limpias.
Por último, también tener en cuenta que si realizamos un lavado de manos con solución hidroalcóholica los guantes a utilizar serán guantes sin polvo.
Para conocer más recomendaciones en relación a la utilización de guantes o qué tipos de guantes utilizar, te recomendamos visitar la sección de documentos y protocolos de organismos y colegios oficiales en nuestra web o nuestro artículo sobre tipos de guantes.